Durante estos meses el tiempo para leer ha sido doblemente propicio. Libros nuevos, libros antiguos, relectura de algunos que ya nos contemplaban desde la estantería... Ayer, sin ir más lejos, retomé varios que me encantaron, especialmente por su contenido intimista.¡Y es que las cosas de dentro, las auténticas, no tienen precio! Hoy mencionaremos unos cuantos, y seguiremos con otros más adelante...
“Los que dejaron su tierra”. Editorial De Libros.com
Autores: Elisa Alegre, Miguel Barluenga, Eduardo Bayona, Óscar F Civieta, Marta Salguero, Ana Sánchez Borroy y Óscar Sena.
Todos ellos son periodistas. Periodistas que se propusieron conocer la realidad de las personas que sufren la despoblación aragonesa. De ahí este precioso ensayo que nos dice cosas muy interesantes: “Junto a la sanidad, la educación es uno de los servicios públicos fundamentales para los pequeños pueblos...” “Un entorno cada vez más vacío, apenas puede cubrir las necesidades de un deportista que prima su pasión por los estudios y el trabajo...” “Hay que empezar a asumir que para algunos pueblos ya es tarde...”
“Lo rural ha muerto, viva lo Rural”. Editorial de Dobleuve Comunicación. Autor: Víctor Guiu
Este Licenciado en Historia, y a la vez poeta, nos va alternando vivencias y reflexiones con poesía y ensayo...
En la página 153, formula una pregunta: ¿Hay motivo para la esperanza? En la página 86: “Cuando a Lorenzo le dijeron sus padres que iba a ir a estudiar a la capital, se le puso un nudo en la garganta... Era una oportunidad... Ya entonces sabía que marchar de allí suponía no volver nunca o, si volvía, ya no sería lo mismo”. Y cierra el libro con:“Igual comenzamos a tratar el medio rural y su realidad como se merece, si antes, claro, no se ha muerto”.
“Pastora y Leona”. Editorial Centro de Estudios del Bajo Martín.
Autor: Miguel Gracia Fandos
Hijo de un labrador de Samper de Calanda, Miguel nos va contando cómo la fuerza muscular de las caballerías (en este caso Pastora y Leona), se iba sustituyendo por la fuerza de los motores.
Página 16: “La joven Leona demostraba tanto interés por el trabajo y el esfuerzo que muy pronto se ganó la categoría de mula de varas...” La Pastora, con una astucia que no siempre se supone a estos animales que el diccionario llama bestias...” Y de sus primeros recuerdos destaca la siega, la trilla, el aventar, etc. Nos regala fotos entrañables intercaladas en el texto. Remata el epílogo con una preciosa frase: “Mi padre ya iba cogiendo soltura en el manejo del tractor. Alguna vez se encontraba con la Leona por el campo. Se quedaban mirando los dos”.
“La huella de una vida”. Editorial Centro de Estudios del Bajo Martín. Autor: Jesús Tena Pérez (Urrea de Gaén)
En la introducción que realiza Ángel Gonzalvo Vallespí, se dice que este libro se mueve entre la memoria, la oralidad y la vida cotidiana.
Y, seguidamente, Antón Castro nos apuntilla: “Los Tena siempre han sido un poco especiales: se han sentido arraigados en la vida popular, en la tierra y en el paisanaje”.
Comienza así el autor: “Mi propósito al escribir mi historia nunca fue el de hacer un libro con una gran riqueza literaria sabiendo que no estoy suficientemente preparado para ello, sino, símplemente, dejar constancia...”
Pero la verdadera riqueza de este y otros libros similares, está en su contenido. En la grandeza que encierra la vida de los nuestros y que nos es contada para que no olvidemos.
Si ellos, entre grandes penurias a veces, lo consiguieron, creo que SÍ hay motivo para la esperanza.
¡Enhorabuena a los autores! Seguiremos...
Autor : eshijar.
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