Un dia quise amar
una sombra de la vida
quise cogerla en mis brazos
y la sombra me envolvía.
Se me iba de la mano
no tenia cuerpo
no tenia alma
era la muerte que llegaba
a mi espiritu
cansado y empobrecido
de vivir en esta vida
de odios y mentiras
con el jamón en la boca
y el látigo en las manos.
Vi pasar la vida
vi pasar la muerte
vi pasar la mentira
vi pasar el odio
y mi alma y cuerpo
lo envolvía la sombra.
Sombra que no amé
en este mundo de mentiras.
Autor : Diego Lasala Gerique.
Papá, siempre melancólico. La poesía es preciosa
ResponderEliminarUn beso
Bonita pero muy gris. Llegado el verano hay que poner un poco de alegría abuelo!!
ResponderEliminarDiego, la oscuridad siempre aparece en todos escritores, poetas, compositores, etc. etc.
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