lunes, 2 de diciembre de 2019

MI NIÑEZ. Autor: Diego Lasala Gerique.


Tuve la desgracia ( suerte de vivir ), de pasar una cruenta y cruel guerra española, muertos y más muertos, mentiras y más mentiras, asi creci con mis amigos vencedores de la sangrienta guerra.

Fui a párvulos, primero en la casa del cura parroco , mientras arreglaban el convento, para este y otros menesteres decian, que en las escuelas nacionales antes de entrar a clase se formaba a los escolares para cantar un canto falangista en el recreo, si es verdad o no lo es cuando yo pase como escolar a las escuelas nacionales ya no se hacia esto, el servicio social no se ni donde estaba,  dire que los que te quitaban algo de la cartera eran de los vencedores.  Mi madre con mucho sacrificio me compro un bonito gorro almidonado y un aparejo de pescar en Zaragoza.

El gorro en una excursión que se hizo a Urrea de Gaen , con chicos de falange.  No creo que entonces hubiera frente de juventudes en Hijar ,  a la vuelta por la carretera en el puente que salva la acequia en Val de Royo, una cuadrilla de zanganos de los mayorcitos se pusierón a enredar dando empujones sin parar , cuando por fin terminaron me habia desaparecido mi bonito gorro de la cabeza, no habia gorro como el mio, yo creo que llevaban trapos sucios en la cabeza para gorro, el unico gorro tieso de fuerte tela era el mio y los sinverguenzas de los vencedores me lo quitaron.  Bien sabian armar una trifulca para apoderarse y quitar lo que no era de ellos.  Ya no pise más , una sola sala de falange.

Estando pescando en el río, debajo del Club, un hijo de un Secretario del ayuntamiento y yo, vinieron tres o cuatro mozos que no eran payos, preguntaron lo que haciamos, nos cogieron las cañas, se las pasaron del uno al otro , para enterarse como eran los aparejos y por fin se marcharon, fuimos a poner la lombriz y mi caña había desaparecido todo el aparejo de pesca , no asi al hijo del Secretario , los pobrecicos que no eran payos como sabian a quien robaban y a quien no y se les tenia por pobrecicos ladrones.  Posteriormente he conocido por mi servicio a varios de estos payos pero aunque muy amables, no me fiaba de ellos.

Estos mequetrefes payos o no  payos, no solo me quitaron dos de los regalos de los muchos que me hizo mi madre en su vida, que me quitaron la ilusión que tenia con ellos .


Autor :  Diego Lasala Gerique .

3 comentarios:

  1. Querido Diego aquellos años para los garris fueron duros pero con mucho trabajo y teson sacasteis las familia adelante un abrazo.

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  2. Papá, siéntete orgulloso porque hemos llevado con mucha dignidad en Hijar "ser garris" y al que no le gustara "que se aguantara"

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  3. Abuelo, los malos recuerdos mejor desterrarlos. Quédate con los buenos, que fueron muchos, y recuerda la gran familia que has tenido y tienes. Besicos.

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