DGA suministrará el lunes agua embotellada de cuyo reparto se ocuparán los ayuntamientos afectados mientras se ejecutan reparaciones en Cueva Foradada que eliminen la turbidez.
Una intervención en los filtros de la planta depuradora y repartir agua en garrafas son las medidas inmediatas que ha adoptado el Gobierno de Aragón para comenzar a revertir la situación que mantiene a nueve pueblos sin agua potable desde hace más de un mes. El director del Instituto Aragonés del Agua (IAA), Luis Estaún, y la directora del servicio provincial de Sanidad de Teruel, Asunción Navarrete; visitaron este viernes por la mañana la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) que abastece a los municipios de la comarca del Bajo Martín y de Andorra Sierra de Arcos. Vieron sobre el terreno todos los aspectos tratados en una reunión de despacho celebrada un día antes con DGA para intervenir en esta crisis del agua. Estaún y Navarrete recorrieron las instalaciones junto con la jefa de abastecimiento de la planta de la empresa FACSA, Marta Saz; profesionales de los distintos servicios implicados, y alcaldes de las localidades afectadas y de la Comarca del Bajo Martín como administración que tiene la competencia del abastecimiento de agua. Tras la visita y posterior reunión se ha decidido adoptar unas soluciones técnicas inmediatas para intentar disponer de agua potable cuanto antes.
Luis Estaún explicó que se ha tomado la decisión de cambiar el lecho filtrante de arena y sustituir la bomba mamut de los filtros con el objetivo de eliminar la turbidez del agua. Una medida con la que Navarrete avanzó que «se prevé que se solucione el problema cuanto antes» y afirmó que se mantendrán, como se ha hecho a lo largo de todo el mes, analíticas periódicas para ir comprobando la evolución de las medidas adoptadas. Mientras se adoptan estas soluciones, la Dirección General de Interior y Emergencias del Gobierno de Aragón va a suministrar a los pueblos agua potable. Miguel Ángel Clavero, director de Interior y Emergencias, confirmó que el lunes llevarán 5.000 garrafas de 5 litros y serán los ayuntamientos de la zona los encargados de su reparto.
Como recuerdan desde DGA, el problema se inició a principios de septiembre, cuando las tormentas ocasionaron arrastre de tierras que generaron turbidez en el agua. Semanalmente, se han realizado distintas analíticas que mostraban una mejoría lenta en los parámetros físico-químicos, pero los últimos resultados obtenidos esta emana (el pasado 2 de octubre) mostraron un empeoramiento, por lo que, además de mantener las restricciones al consumo de agua de boca, se ha considerado necesario emprender actuaciones a corto plazo. Los pueblos disponen de agua, pero no pueden usarla para consumo humano.
A las tormentas se suma una acuciante sequía que dejó el caudal del embalse a cotas bajas y se suma que la toma flotante está rota desde hace más de un año. Sin este elemento, que la Comarca del Bajo Martín aprobó reparar de urgencia- la captación no se hace en la superficie, sino cerca del fondo y, por tanto, más cerca de lodos y barros. Más de 6.500 personas siguen sin poder disponer del agua para uso humano desde la DANA de finales de agosto. Las restricciones de agua afectan a 9 pueblos de las comarcas Bajo Martín y Andorra Sierra de Arcos, que se abastecen del embalse de Cueva Foradada. Los municipios afectados son Albalate del Arzobispo, Urrea de Gaén, Híjar, Samper de Calanda, Jatiel, Castelnou y La Puebla de Híjar, en el Bajo Martín, y Ariño y Oliete, de la Comarca de Andorra-Sierra de Arcos. Ariño es el único municipio que tiene agua potable a día de hoy, al disponer de dos puntos de captación de agua, uno de ellos, un pozo. A estas localidades se añade el polígono Venta del Barro, donde a diario se desplazan cientos de personas a trabajar en diferentes industrias.
Fuente : www.lacomarca.net
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